miércoles, 17 de mayo de 2017

NO gracias. El colesterol en sangre, la mortalidad coronaria y el NICE. Lecciones de prevención primaria y de mucha presunción. (Por Juan Gérvas)


La historia del colesterol, como dice el autor de este texto, es triste; el ejemplo perfecto de la construcción de un consenso basado en mala ciencia, mala difusión de la ciencia y, por supuesto, intereses comerciales, no solo de la industria farmacéutica o alimentaria sino también de sociedades científicas, de profesionales y de académicos. El éxito de la resistencia profesional de los médicos de cabecera británicos contra una recomendación del NICE, -que condenaba a tomar hipolipemiantes a millones de ciudadanos sanos, mientras los resultados completos de los ensayos clínicos siguen siendo secretos- sirve al Dr. Gérvas para hilar una historia de “presunción científica y médica” 

Descarga gratuita de guías y manuales de la biblioteca virtual de urgencias y emergencias.

 http://urgenciasyemergen.blogspot.com.es/p/guias-y-manuales.html

 

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  • Manual de Procedimientos SAMUR-Protección Civil 2017. NUEVO

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Front. Pharmacol. Repensando la evaluación de fármacos para las fracturas.

En enero de 2014, el Comité de Evaluación de Riesgos de Farmacovigilancia de la EMA recomendó que el ranelato de estroncio ya no se utilice para la osteoporosis. Sin embargo, el Comité de Medicamentos para Uso Humano de EMA decidió restringir su uso en lugar de prohibirlo. Partiendo de este hecho, se revisó la evidencia de fármacos para la prevención de fracturas en los últimos 30 año.
http://journal.frontiersin.org/article/10.3389/fphar.2017.00265/ 

Fármacos para el tratamiento de los miomas. Cochrane

Pregunta de la revisión
Se examinó la evidencia sobre la efectividad y la seguridad de una clase nueva de fármacos llamados moduladores selectivos de los receptores de progesterona (MSRP) para el tratamiento de las pacientes premenopáusicas con miomas uterinos.

Conclusiones de los autores: 
El uso a corto plazo de los MSRP resultó en una mejor calidad de vida, una reducción de la hemorragia menstrual y tasas de amenorrea más altas en comparación con un placebo. Por lo tanto, los MSRP pueden ser un tratamiento efectivo para las pacientes con miomas sintomáticos. La evidencia derivada de un ECA no mostró ninguna diferencia entre el acetato de leuprolide y el MSRP en lo que se refiere a mejor calidad de vida y síntomas de hemorragia. La evidencia fue insuficiente para indicar si la efectividad fue diferente entre los MSRP y leuprolide. Con mayor frecuencia los investigadores observaron cambios del endometrio asociados a los MSRP en las pacientes tratadas con MSRP que en las tratadas con placebo o acetato de leuprolide. Como se señaló anteriormente, los cambios del endometrio asociados a los MSRP son benignos, no están relacionados con el cáncer y no son precancerosos. El sesgo de informe puede repercutir en la conclusión de este metanálisis. Se necesitan ECA bien diseñados que comparen MSRP versus otros tratamientos.
http://www.cochrane.org/es/CD010770/farmacos-para-el-tratamiento-de-los-miomas 

CIMUN. Riesgo de efectos adversos graves en pacientes con enfermedad cardíaca asociado a butilbromuro de hioscina inyectable

La Medicines and Healthcare Products Regulatory Agency (MHRA, por su sigla en inglés), agencia sanitaria de Reino Unido, informó sobre el riesgo de efectos adversos graves en pacientes con enfermedad cardíaca subyacente asociados a la inyección de butilbromuro de hioscina. La agencia reveló que ha recibido 9 informes de pacientes que fallecieron al recibir la inyección de butilbromuro de hioscina, en la mayoría de estos casos la reacción adversa fatal se informó como infarto agudo al miocardio o paro cardíaco (1).

Butilbromuro de hioscina es un fármaco de venta libre que pertenece al grupo de los antiespasmódicos. Actúa relajando la musculatura intestinal y reduciendo la motilidad intestinal (movimientos de los intestinos). Se utiliza principalmente para tratar los espasmos intestinales (calambres) (2).

Los efectos secundarios más comunes observados con el uso de butilbromuro de hioscina incluyen estreñimiento, boca seca, dificultad para orinar y náuseas. En los casos más graves se han descrito edema de las manos o pies, aumento del pulso, mareos, diarrea, problemas de la visión y dolor en los ojos (3).

Butilbromuro de hioscina también puede causar: taquicardia, hipotensión y anafilaxia. Estos pueden ser más graves en pacientes con cardiopatía subyacente (por ejemplo insuficiencia cardiaca, cardiopatía coronaria, arritmia cardíaca o hipertensión). Los informes indican que hay mayor probabilidad de muerte asociada a la anafilaxia en pacientes con cardiopatía coronaria subyacente en comparación con los que no lo tienen (1, 4).
http://cimuncol.blogspot.com.es/2017/05/riesgo-de-efectos-adversos-graves-en.html

Health Canada. Riesgo de uso inadecuado, abuso, tolerancia y dependencia física asociados utilización de quetiapina

Mensajes clave para los profesionales de la salud:
Se han reportado casos de mal uso, abuso, tolerancia y / o dependencia física de la quetiapina.
     Estos casos incluyen pacientes adultos y adolescentes que usan quetiapina sola o con otras sustancias de abuso.
     Se debe tener precaución al prescribir quetiapina a pacientes con antecedentes de abuso de alcohol o drogas.
     Los pacientes deben ser observados de cerca para detectar signos de mal uso o abuso de Seroquel / Seroquel XR (por ejemplo, desarrollo de tolerancia, aumento de la dosis, comportamiento de búsqueda de fármacos), particularmente si tienen antecedentes de abuso de alcohol o drogas.

http://www.hc-sc.gc.ca/dhp-mps/medeff/bulletin/hpiw-ivps_2017-04-page2-eng.php#b3 

(Infac) Urgencias de pediatría: protocolos de atención prehospitalaria.

http://www.osakidetza.euskadi.eus/contenidos/informacion/cevime_infac_2017

NORMAS DE BUENA PRÁCTICA CLÍNICA EN LA ATENCIÓN A URGENCIAS
PEDIÁTRICAS EN EL ÁMBITO PREHOSPITALARIO (GIDEP)
1. En todos los centros de salud debe haber medicación y material para la atención de las urgencias pediátricas. Dicho material debe estar ubicado en un carro de emergencias y también en bolsas o maletines por si hubiera que salir a atender una urgencia fuera del centro.
2. Debe existir un protocolo o proceso de revisión del material y de la medicación de urgencias con profesionales que se responsabilicen de él en cada centro.
3. La medicación y el material de urgencias deben estar consensuados y unificados, dependiendo de las organizaciones de servicios y atendiendo al ámbito de aplicación: Emergencias y Transporte Sanitario, Atención Primaria y Puntos de Atención Continuada (PAC).
4. En los centros de AP y PAC debe haber un sistema de triaje eficaz de los pacientes que solicitan asistencia urgente o indemorable para garantizar la atención en un tiempo proporcionado al nivel de gravedad y mejorar la accesibilidad.
5. Tiene que haber cauces de comunicación apropiados entre los diferentes niveles asistenciales para la atención, el transporte sanitario y la recepción del paciente cuando se precise el traslado desde el lugar o centro sanitario donde se preste la primera asistencia hasta el centro de destino. Se debe preconizar, además, el uso de una herramienta para establecer el tipo de recurso más adecuado para el traslado.
6. Deben existir protocolos por patologías, que estén consensuados, actualizados y revisados periódicamente, para estandarizar la asistencia entre los diferentes niveles asistenciales. Estos protocolos han de ser claros y concisos para que puedan servir al profesional sanitario en la toma de decisiones en el momento que se necesite.
7. La documentación que se vaya a precisar para el manejo de la emergencia (esquemas protocolizados de atención sanitaria, documentos para el traslado y para el score del tipo de recurso sanitario, etc.), tiene que encontrarse muy accesible: una copia en el carro de emergencias y también un acceso informático desde la propia historia clínica de cada niño.
8. Los sanitarios y el personal implicados deben recibir formación continuada acerca de los protocolos de atención disponibles y sus actualizaciones, así como sobre las técnicas que se deben aplicar: RCP básica y avanzada, desfibrilador semiautomático (DESA), obtención de vías venosas, vía intraósea, etc.
9. Debe existir documentación sobre las condiciones de manejo de la medicación en situaciones de urgencia que facilite su preparación con la mayor seguridad posible, para minimizar los errores y garantizar la seguridad del paciente.
10. Los niños y adolescentes que precisen una atención de emergencia tienen derecho a estar acompañados, durante su atención y durante la realización de los procedimientos necesarios, por alguno de sus familiares o personas responsables, que además puedan aportar información para conseguir una anamnesis lo más precisa posible.