El acetaminofén se encuentra entre los medicamentos más utilizados en los Estados Unidos y en todo el mundo, principalmente sin receta, pero también con receta1. El acetaminofén se comercializa en los Estados Unidos como Tylenol y en otros lugares como paracetamol, para la fiebre, el dolor y los dolores menores. El acetaminofén se vende con frecuencia en combinación con formulaciones para el resfriado, la gripe y los opioides2.
Se estima que el 20% de los adultos en los Estados Unidos usan acetaminofén3. Sin embargo, puede tener efectos secundarios graves y, a veces, fatales. El acetaminofén es una de las principales causas de lesión hepática irreversible que conduce a la necesidad de trasplante, así como a muertes por sobredosis no intencionales e intencionales2.
En este comentario, proporcionamos actualizaciones para los proveedores de atención médica sobre los mitos persistentes sobre el acetaminofén. Estos incluyen que el acetaminofén es antiinflamatorio, el riesgo de sobredosis es raro, es inofensivo para el hígado y seguro durante el embarazo.
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