En este blog es una constante la reflexión sobre aumentar el valor de la práctica clínica. En concreto, y muy resumidamente, tenemos dos estrategias: potenciar prácticas contrastadas que han demostrado su valor añadido y desestimar aquellas que no lo aportan.
Diferentes estudios, entre otros los liderados por Vinay Prassad, piden que tomemos conciencia del derroche (entre el 25 y el 40% del presupuesto sanitario) que supone mantener estas prácticas que no solo no aportan valor, sino que pueden causar perjuicios en algunas ocasiones.
Si nos centramos en la reversión de las prácticas de bajo valor, también se ha expuesto en este blog en más de una ocasión que ha de pasar una década entre el momento en que se demuestra que una práctica clínica no aporta valor y cuando deja de realizarse.
Brian W. Powers y colaboradores proponen, en un artículo reciente publicado en la revista JAMA, una estrategia basada en tres líneas de trabajo: evidencia, eminencia y eficiencia
http://gestionclinicavarela.blogspot.com/2021/01/disminuir-las-practicas-sin-valor-las.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario