lunes, 2 de diciembre de 2024

(CMAJ) Actualización de 2024 de la GPC de manejo del trastorno por consumo de opioides.

 https://www.cmaj.ca/

Antecedentes En un panorama cambiante de prácticas y políticas, es necesario revisar e incorporar la evidencia científica más reciente para garantizar un manejo clínico óptimo para las personas con trastorno por consumo de opioides. Ofrecemos una sinopsis de la actualización de 2024 de la Guía nacional de 2018 para el manejo clínico del trastorno por consumo de opioides, de la Iniciativa de investigación canadiense en asuntos relacionados con las sustancias.

Métodos Para esta actualización, seguimos los Estándares para el Desarrollo de Guías de Práctica Clínica Confiables del Instituto de Medicina de los Estados Unidos y utilizamos la herramienta de Evaluación de la Investigación y Evaluación de Guías: Excelencia en las Recomendaciones para garantizar la calidad de las guías. Llevamos a cabo una revisión sistemática exhaustiva de la literatura, capturando la literatura relevante desde el 1 de enero de 2017 hasta el 14 de septiembre de 2023. Redactamos y calificamos las recomendaciones de acuerdo con el enfoque de Calificación de Recomendaciones, Evaluaciones, Desarrollo y Evaluación. Un comité nacional externo multidisciplinario, que incluía a personas con experiencia viva o vivida de trastorno por consumo de opioides, proporcionó aportes que se incorporaron a la guía.

Recomendaciones De las 11 recomendaciones iniciales de la guía de 2018, 3 se mantuvieron sin cambios y 8 se actualizaron. En concreto, 4 recomendaciones se consolidaron en una única recomendación revisada; 1 recomendación se dividió en 2; otra recomendación se trasladó a convertirse en una consideración especial; y 2 ​​recomendaciones se revisaron. Los cambios clave han surgido de la evidencia sustancial que respalda que la metadona y la buprenorfina son igualmente eficaces, en particular en la reducción del uso de opioides y los eventos adversos, y ambas se consideran ahora opciones de tratamiento de primera línea preferidas. La morfina oral de liberación lenta se recomienda como una opción de segunda línea. Las intervenciones psicosociales pueden ofrecerse como tratamiento complementario, pero no deben ser obligatorias. La guía reafirma la importancia de evitar el manejo de la abstinencia como una intervención independiente y de incorporar servicios de reducción de daños basados ​​en la evidencia a lo largo del continuo de atención.



No hay comentarios:

Publicar un comentario