IPT SEMAGLUTIDA.
CONCLUSIÓN
La elección del tratamiento antidiabético, dentro de las alternativas disponibles (entre las que se encuentra SEMA), vendrá determinado por la necesidad en la reducción de HbA1c, las comorbilidades del paciente y por el perfil de seguridad de cada una de ellas, entre otros factores. En este sentido SEMA se puede considerar una opción de tratameinto en los siguientes casos:
• Tratamiento combinado doble con MET: en los casos en los que se considere apropiado el uso de un GLP-1 añadido a MET y siempre y cuando exista contraindicación o intolerancia al uso de MET + SU. SEMA + MET representa una alternativa de tratamiento a otros análogos del GLP-1 de la misma manera que podrían ser alternativas las combinaciones dobles de MET + ADO o insulina.
• En tratamiento combinado triple: SEMA, en combinación con MET + SU, representa una alternativa de tratamiento a los ADO, otros análogos de GLP-1 o insulina.
La vía de administración subcutánea de SEMA podría suponer una limitación en cuanto a preferencia por parte de los pacientes, sin embargo, su frecuencia de administración semanal, a su vez podría ser una ventaja, aunque existen otros GLP-1 también de administración semanal.
SEMA presenta un perfil de seguridad consistente con el de otros fármacos de su mismo grupo, a excepción de las complicaciones asociadas a retinopatía diabética en pacientes con retinopatía diabética previa y uso de insulina, además de una mayor incidencia de efectos adversos gastrointestinales que llevaron a discontinuación prematura del tratamiento. Esto debería tenerse en cuenta en pacientes con trastorno de la motilidad intestinal, gastroparesia u otra enfermedad gastrointestinal coexistente. La incidencia de complicaciones asociadas a retinopatía diabética es un dato preocupante, especialmente en pacientes en tratamiento previo con insulina o aquellos con retinopatía diabética previa. Particularmente en este grupo de pacientes deberá valorarse el tratamiento con otras alternativas y en el caso de que se decida el tratamiento con semaglutida se deberá tener precaución a la hora de utilizarlo y se deberá vigilar estrechamente al paciente.
Además, SEMA dispone de un ensayo clínico de dos años de duración en pacientes con riesgo cardiovascular elevado que demostró la no inferioridad frente a placebo en la variable MACE. Los resultados no indican que SEMA tenga un efecto beneficioso o negativo sobre la muerte cardiovascular o no cardiovascular, a diferencia de LIRA, que sí ha mostrado una reducción estadísticamente significativa de la mortalidad cardiovascular.
La información en pacientes de edad ≥ 75 años, pacientes con insuficiencia renal o hepática graves es limitada. Los datos no sugieren que sea necesario el ajuste de dosis en esos grupos de edad. No se recomienda su uso en pacientes con enfermedad renal terminal. Tampoco se dispone de datos de eficacia y seguridad en niños y adolescentes menores de 18 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario