Julian Tudor Hart
Las enfermedades crónicas más prevalentes en España no son la
hipertensión o la diabetes; se llaman pobreza y exclusión social. Para
ellas no existe tratamiento farmacológico, sino político. En ese sentido
el gobierno de España y la Troika ejercen bien el papel de agentes
patógenos, contra los que es preciso encontrar un tratamiento urgente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario