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Los síndromes neuropsiquiátricos (NPS, por sus siglas en inglés) son comunes en los trastornos neurodegenerativos (NDD, por sus siglas en inglés), comprometen la calidad de vida de los pacientes y sus cuidadores, y se asocian con una progresión más rápida de la enfermedad, una necesidad más temprana de atención en hogares de ancianos y una peor calidad de vida. Los avances en la farmacología traslacional, el diseño y la realización de ensayos clínicos y la comprensión de la patobiología de los NDD están aportando nuevas terapias a la atención clínica.
Observaciones Las definiciones de consenso han evolucionado para la psicosis, la agitación, la apatía, la depresión y la desinhibición en los NDD. Las intervenciones psicosociales pueden reducir los síntomas conductuales leves en los pacientes con NDD, y la farmacoterapia está disponible para las NPS en los NDD. El brexpiprazol está aprobado para el tratamiento de la agitación asociada con la demencia de la enfermedad de Alzheimer, y la pimavanserina está aprobada para el tratamiento de los delirios y las alucinaciones asociadas con la psicosis de la enfermedad de Parkinson. Se están llevando a cabo ensayos en varios de los NDD y se están evaluando diversos mecanismos de acción para determinar su efecto sobre las NSP.
Conclusiones y relevancia La detección y caracterización de las NSP en pacientes con NDD es la base de una atención excelente. Las nuevas definiciones de NSP en los NDD pueden servir de base para las decisiones relativas a las poblaciones de ensayos clínicos y trasladarse a la práctica clínica. Las terapias psicosociales y farmacológicas pueden reducir los síntomas conductuales y mejorar la calidad de vida de los pacientes y cuidadores. Los agentes aprobados pueden establecer precedentes regulatorios, demostrar estrategias de ensayo exitosas y proporcionar la base para nuevos avances en el desarrollo de tratamientos.
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