BMC - Efectos adversos de los fármacos Z para los trastornos del sueño en personas que viven con demencia.

https://bmcmedicine.biomedcentral.com/articles/10.1186/s12916-020-01821-5 

Los somníferos potentes, conocidos como medicamentos Z, usados en las dosis más altas en la demencia se asocian con un mayor riesgo de fracturas y accidentes cerebrovasculares, similar o mayor al de las benzodiazepinas en las dosis más altas.

La alteración del sueño es común entre las personas con demencia y el impacto para los pacientes y sus familias es significativo. Hasta la fecha, no existen tratamientos efectivos comprobados disponibles. A estos pacientes a menudo se les recetan los denominados medicamentos Z (zopiclona, ​​zaleplon y zolpidem).

Los medicamentos Z se recetan comúnmente para ayudar a las personas a dormir; sin embargo, estos medicamentos nunca se han autorizado de forma específica para la demencia  y se han asociado con eventos adversos como caídas y riesgos de fracturas en personas mayores.

Para conocer un poco más de como este tipo de medicamentos puede afectar a las personas con demencia un grupo de investigación  analizó datos de 27.090 pacientes diagnosticados con demencia entre enero de 2000 y marzo de 2016. La edad promedio de los pacientes era 83 y el 62 por ciento eran mujeres.

Se observaron los eventos adversos de 3.532 pacientes a los que se les habían recetado medicamentos Z y los compararon con personas que sufrían trastornos del sueño a quienes no se les habían recetado sedantes y pacientes equiparables a los que se les habían recetado benzodiacepinas. También se buscó  si la dosis del fármaco Z influía en los resultados adversos.

Se estudiaron  una variedad de resultados adversos que incluyeron fracturas, caídas, trombosis venosa profunda, accidente cerebrovascular y muerte, durante dos años. Y se estuvo  particularmente interesado ​​en determinar si las dosis más altas conducían a peores resultados. Se definieron las dosis más altas de fármacos Z y de benzodiazepinas como prescripciones equivalentes a > 7,5 mg de zopiclona o  > 5 mg de diazepam al día.

A los pacientes a los que se les prescribieron medicamentos Z, al 17 por ciento se les administraron las dosis más altas. Y se encontró que estos pacientes con dosis más altas tenían más riesgo de caídas y fracturas, en particular fracturas de cadera y derrames cerebrales, en comparación con los pacientes que no tomaban ningún medicamento para la alteración del sueño. Por otro lado, no se encontró que los que tomaban dosis más bajas (3,75 mg de zopiclona o equivalente) tuvieran un mayor riesgo de resultados adversos.

No hubo diferencias en los eventos adversos para el uso de  los medicamentos Z en comparación con las benzodiazepinas, excepto las tasas de mortalidad más bajas con los medicamentos Z.

Esta investigación  muestra que deben evitarse  las dosis más altas de medicamentos Z, si es posible, en personas que viven con demencia, y se deben considerar preferentemente las alternativas no farmacológicas.