La prediabetes, o diabetes limítrofe, que se caracteriza por niveles
ligeramente elevados de glucosa en sangre de forma sostenida en el
tiempo, afecta a un considerable porcentaje de la población. En Reino
Unido por ejemplo, una de cada diez personas se ven afectadas, y en el
5-10 por ciento de los casos la condición avanza hasta una diabetes tipo
2 establecida en un plazo de 10 años, con mayor riesgo de muerte
temprana y resultados de salud pobres, con riesgo de lesiones nerviosas,
ceguera o amputación. La condición prediabética se puede tratar con
ejercicio y una dieta saludable para intentar ralentizar su evolución,
pero cuanto mayor haya sido el avance hacia la enfermedad plena, más
difícil será frenar esta progresión.
La liraglutida es un medicamento que se ha mostrado efectivo para la
pérdida de peso. Actúa imitando la acción de la hormona GLP-1 que se
origina forma natural por el intestino como respuesta a la ingesta de
alimento, promoviendo la sensación de saciedad por activación de las
áreas del hipotálamo que controlan el apetito y la alimentación. Se ha
comprobado que muchas personas obesas producen menores cantidades de
esta hormona, lo que se asocia con incorporaciones de energía excesiva
en la dieta.
Investigadores del ‘Imperial College of London’ han observado que el
medicamento es también efectivo en pacientes prediabéticos,
interviniendo de forma favorable, protegiendo de la progresión hacia la
enfermedad diabética cuando se combina con dieta y ejercicio, e incluso
puede llegar a revertir por completo la situación prediabética.
En el ensayo participaron 2.254 adultos obesos con prediabetes, en
191 sitios de investigación en 27 países, en los que se estudió si la
adición de inyecciones subcutáneas autoadministradas diarias de
liraglutida (3.0 mg) a un programa de dieta y el ejercicio podía ayudar a
evitar la progresión hacia la diabetes, en comparación con la dieta y
el ejercicio por sí solo.
Después de tres años de seguimiento, los investigadores encontraron
que los pacientes que recibieron liraglutida fueron un 80% menos
propensos a desarrollar diabetes que aquellos que recibieron placebo. En
el 60% de estos pacientes, la prediabetes dejó de estar presente y los
pacientes volvieron presentar niveles saludables de glucosa en sangre.
De los pacientes que finalmente desarrollaron la diabetes, los inscritos
en el grupo liraglutida tardaron casi tres veces más tiempo en llegar a
la enfermedad que aquellos en el grupo placebo. Además, liraglutida se
vinculó con una mayor pérdida de peso sostenida después de tres años, en
comparación con placebo, con pérdidas del 7% del peso corporal en
comparación con el 2% en los pacientes sin tratamiento.
Liraglutida podría proporcionar beneficios para la salud en términos
de reducción del riesgo de diabetes en individuos con obesidad y
prediabetes, pero se trata de un medicamento caro por lo que los autores
señalan que si se pudiera desarrollar una prueba para detectar la
deficiencia de GLP-1, ello permitiría asegurar que el fármaco se da sólo
a aquellos que se sabe que obtendrán beneficio.
http://www.dicaf.es/dicafdigest_card.php?id=6298#.WMvMYMl6EpO
No hay comentarios:
Publicar un comentario