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OBJETIVO
La diabetes tipo 2 (DT2) aumenta el riesgo de sufrir resultados adversos hepáticos importantes (MALO), incluida la cirrosis y sus complicaciones. Los pacientes con diabetes tipo 2 frecuentemente tienen otros rasgos del síndrome metabólico (MetS). Sigue siendo incierto si existe un efecto sinérgico de la acumulación de rasgos del MetS en el riesgo futuro de MALO.
Los pacientes con diabetes tipo 2 sin antecedentes de enfermedad hepática se identificaron a partir de registros nacionales en Suecia de 1998 a 2021. Los rasgos del síndrome metabólico incluían hipertensión, niveles bajos de HDL, hipertrigliceridemia, obesidad y albuminuria, además de diabetes tipo 2. Los eventos MALO se identificaron según la codificación administrativa de los registros nacionales hasta el 31 de octubre de 2022. Los datos se analizaron utilizando modelos de regresión de Cox.
En total, se identificaron 230.992 pacientes (edad media 64 años; 58 % hombres), de los cuales 3.215 (1,39 %) desarrollaron MALO durante una mediana de seguimiento de 9,9 años. En comparación con los pacientes con un rasgo de MetS (solo DT2) al inicio del estudio, aquellos con más de un rasgo de MetS tuvieron una tasa más alta de MALO (índice de riesgo ajustado [aHR] 2,33, IC 95% 1,53–3,54). La tasa de MALO aumentó progresivamente a medida que aumentaba el número de rasgos de MetS al inicio del estudio (aHR 1,28 por rasgo agregado, IC 95% 1,23–1,33). Durante el seguimiento, los pacientes que adquirieron rasgos adicionales de MetS tuvieron una tasa progresivamente mayor de MALO. El rasgo del SM con la mayor asociación con MALO incidentes fue la hipertensión (aHR 2,06, IC 95 % 1,57–2,71).
Tener o adquirir rasgos adicionales de MetS aumenta la tasa de progresión a MALO en pacientes con diabetes tipo 2. Estos resultados podrían utilizarse para informar las iniciativas de detección de enfermedades hepáticas.
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