La hipertrigliceridemia es un problema clínico común. Los estudios epidemiológicos y genéticos han establecido que las lipoproteínas ricas en triglicéridos (TRL) y sus restos como contribuyentes importantes a ASCVD, mientras que la hipertrigliceridemia severa aumenta el riesgo de pancreatitis. Si bien la lipoproteína de baja densidad es el objetivo principal del tratamiento para la terapia hipolipemiante, los objetivos secundarios que reflejan la contribución de TRL como apoB y no HDL-C se recomiendan en las guías actuales. La reducción de los triglicéridos severamente elevados es importante para evitar o reducir el riesgo de pancreatitis. Aquí discutimos las intervenciones para la hipertrigliceridemia, incluida la dieta y el estilo de vida, los tratamientos establecidos como las preparaciones de fibratos y ácidos grasos omega-3 y las terapias emergentes, incluidos varios agentes biológicos.
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