La clozapina es el
antipsicótico más efectivo, pero está reservado para personas con
esquizofrenia que no han respondido adecuadamente a otros dos
antipsicóticos. Tiene una gran carga de eventos adversos y requiere una estrecha vigilancia.
Ya
sea recetado por el especialista del hospital o el médico de cabecera,
el médico de cabecera a menudo será responsable del monitoreo de los
efectos adversos y la salud general de los pacientes que toman
clozapina. Todos los profesionales de la salud que manejan estos pacientes deben registrarse con un servicio de monitoreo de clozapina.
Los efectos adversos graves incluyen neutropenia, agranulocitosis y miocarditis. El monitoreo ayuda a prevenir resultados fatales.
Los
cambios en la dosis de clozapina, especialmente en las interrupciones
del tratamiento, deben discutirse con el psiquiatra del paciente.
https://www.nps.org.au/australian-prescriber/articles/clozapine-in-primary-care
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