http://www.ccjm.org/content/81/1/11.full.pdf+html
Este artículo promueve el volver al modelo previo de tratamiento por
objetivos, en cuanto a los valores de LDL, que es la principal
aportación del JNC 8 (y desde mi humilde opinión la más importante, sino
la única, además de incluir la enfermedad cerebro-vascular junto a la
enf coronaria y la enf vascular periférica como definitorios de
prevención secundaria).
Después hace las críticas que ya son bien conocidas sobre lo que supone y
las limitaciones de la calculadora de riesgo que propone la JNAC 8.
Para defender su posición, claramente intervencionista y tradicional,
pone unos cuantos ejemplos bastantes extremos, que en todo caso no hacen
sino recordar que finalmente el juicio clínico es irreemplazable.
Demasiada argumentación para acabar en una obviedad.
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