martes, 10 de diciembre de 2013

Una pregunta importante: ¿Esta nueva medicina sustituye a uno de mis medicamentos actuales?. Sano y Salvo

La página web SafeMedicationUse.ca es un proyecto del ISMP – Canadá. Esta integrada en el Sistema de Prevención y Notificación de Incidentes relacionados con la Medicación Canadiense (CMIRPS), pero con la particularidad de que está orientada a la población general. La participación del usuario en estos programas puede generar un volumen importante de notificaciones y proporcionar información útil para la detección de problemas en el proceso de la atención sanitaria. Los usuarios pueden detectar incidentes o eventos adversos que han podido pasar desapercibidos o no han sido notificados por los profesionales sanitarios y, además, pueden desempeñar un papel activo en la identificación de los factores contribuyentes de estos eventos.

En esta página los usuarios pueden notificar los incidentes de medicación que identifiquen y también pueden obtener información sobre el uso de medicamentos de forma segura a través de hojas informativas, alertas y otros recursos.

Con el título “Una pregunta importante - ¿Esta nueva medicina sustituye a uno de mis medicamentos actuales?" la hoja informativa del pasado 28 de noviembre aborda el tema de la duplicidad de terapéutica ilustrándolo con un caso en el que un paciente tomó simultáneamente warfarina y dabigatrán durante 5 días, hasta que la presencia de un hematoma en la pierna le hace consultar a un médico que le aconseja que deje de tomar uno de los antiacoagulantes.

El caso se acompaña de una serie consejos para usuarios sobre cómo prevenir errores como este:
- Si un médico le receta un medicamento nuevo, asegúrese de preguntar si este reemplaza a otra medicina o cambia la forma de tomar otro medicamento.
- Si un médico le indica que deje de tomar un medicamento, asegúrese de informar a su farmacéutico. Esto le ayudará a asegurarse de que sus registros en la farmacia se mantienen actualizados.
- Guarde una lista de sus medicamentos y llévela con usted en todo momento. Llévela siempre que acuda a un centro sanitario o a una consulta médica y actualícela cada vez que haya un cambio en sus medicamentos. También puede solicitar a su médico o enfermera que le ayude a hacer los cambios necesarios en su lista de medicamentos
- Cada vez que usted recoge medicamentos en la farmacia, revise sus prescripciones. Asegúrese de que ha recibido los medicamentos que usted está esperando. Puede ser útil comparar los envases recetados que recibe en la farmacia con la lista de los medicamentos. Si hay diferencias inesperadas entre los envases que recibe y su lista, hable con el personal de la farmacia.
- Conozca la razón por la que usted está tomando cada uno de sus medicamentos. Conocer la razón de cada medicamento puede ayudarle a entender si se supone que está tomando más de un medicamento por el mismo motivo, o si se ha producido un error.
- Si un profesional de la salud le indica que debe cambiar la forma en que usted está tomando un medicamento, incluida la interrupción de un medicamento por completo, asegúrese de obtener las nuevas instrucciones por escrito. Si recibe nuevas instrucciones por teléfono, escríbalas y repítalas antes de colgar el teléfono.
- Lea siempre cualquier material impreso que reciba con su medicamento. A menudo en los prospectos se incluye información sobre los medicamentos que pueden interaccionar con los demás, así como información acerca de los posibles efectos secundarios. Si hay algo que no entiende, hable con su farmacéutico.

Además propone a los profesionales de la salud una serie de pasos que pueden ayudar a evitar malentendidos cuando un medicamento sea reemplazado por otro nuevo:
- Revise todos los cambios con los pacientes y pídales que los repitan para asegurarse de que han entendido las nuevas instrucciones.
- Asegúrese de que los cambios realizados en los medicamentos de los pacientes se comuniquen a otros médicos y profesionales de la salud. Al escribir las recetas de medicamentos que vayan a sustituir a otros medicamentos incluya información escrita sobre las medicinas que deben ser retiradas.
- Actualice la historia clínica de los pacientes para asegurarse de que los medicamentos retirados se eliminan de la lista de los tratamientos activos.
- Ayude a los pacientes a actualizar su lista de medicamentos.

La duplicidad terapéutica es uno de errores de medicación más frecuentes. Su aparición se ve favorecida, entre otros factores, por la falta de actualización de los medicamentos activos en la historia clínica, la atención de la persona en diversos dispositivos asistenciales o por múltiples prescriptores, la dificultad de acceso al historial farmacoterapéutico del paciente, la falta de un proceso de conciliación, la autoprescripción, etc. Creemos que las recomendaciones reseñadas así como la generalización de una historia clínica electrónica compartida y la implantación de sistemas automatizados de alertas de duplicidades, contribuirán sin duda a la mejora de la seguridad en la prescripción.

Institute for Safe Medication Practices Canada (ISMP Canada). Toronto, Ontario; 2013. An Important Question - Does this new medicine replace one of my current medicines? SafeMedicationUse.ca Newsletter 2013 Nov [citado 1 dic 2013]; 8(4). 


Publicado por José Ángel Maderuelo

Los conflictos de intereses de los autores y las recomendaciones de las Guías de Práctica Clínica en diabetes mellitus. Quid pro quo

Los conflictos de intereses de los autores y las recomendaciones de las Guías de Práctica Clínica en diabetes mellitus

A veces no solo se trata de la calidad de la evidencia científica con la que hacer tal o cual recomendación en las Guías de Práctica Clínica (GPC), si no de quién la localiza y la interpreta. La interpretación de estas evidencias generará recomendaciones que modelarán la práctica clínica de los sanitarios, de ahí, que los conflictos de interés (CI) en estos temas sean tan importantes. Un tema que por regla general no se le da la debida importancia. Y es que, aunque no se quiera, los CI son fuente de importantes sesgos en la interpretación de las conclusiones de los ensayos clínicos (EC) y con ello de las recomendaciones ulteriores.
Los CI se definirían como aquellas condiciones secundarias o colaterales que puedan afectar al buen juicio del evaluador en una causa primaria. Dentro de estas condiciones secundarias se encontrarían las relaciones con la industria farmacéutica (IF) como la participación en investigaciones promovidas por ésta... Así, existen datos que sugieren que existe una asociación entre los promotores de los estudios y los resultados; entre la relación de la IF y el comportamiento de los médicos y las opiniones de éstos, y entre los CI y las conclusiones de las revisiones sistemáticas. Y aunque es palpable que las relaciones con la industria de los autores de las GPC son importantes, existe una carencia en la difusión de estos CI. Hay algún trabajo que muestra que solo el 60% de las GPC recogerían estos CI, y que en éstas el 60% tendrían autores con uno o más CI.
Por ello, los objetivos de este estudio fueron la de evaluar la prevalencia de los CI entre los autores de las GPC relacionados con el control glucémico en la diabetes tipo 2 (DM2), si han existido pagos de compañías de la IF y han estado registrados en las GPC. Si existen intereses crematísticos relacionados con la medicación específica recomendada en la GPC.
Se identificaron  las GPC a partir de la National Guideline Clearinghouse (NGC ) norteamericana entre  febrero del 2012 y junio del 2012,  excluyendo aquellas que no dieran información sobre los CI. De ellas se identificaron los diferentes antidiabéticos recomendados y se relacionaron con los CI específicos de los autores y si éstos fueron o no recomendados.
En las  13 GPC evaluadas el porcentaje de autores con una y más declaraciones de relaciones financieras con la IF estuvo entre el 0-94% (media del 44,2%). En dos GPC  hubo un alto porcentaje (91% para la  American Association of Clinical Endocrinologists (AACE) y un 94% para la American Diabetes Association (ADA)) y en tres no hubo ningún autor con CI económicos  (National Institute for Clinical Excellence (NICE), Qatif Primary Health Care (QPHC), y la 
Wisconsin Diabetes Prevention and Control Program (WDPCP)).
El porcentaje de autores con declaraciones de CI económicos con la IF en los medicamentos recomendados en las GPC fue de un 30% (media), dentro de ellas la AACE un 83% , y el ADA un 63% . Lo que da que pensar.
En este aspecto, el 56% de las IF con antidiabéticos recomendados tuvo uno o dos autores con una vinculación financiera con la empresa. Si bien es cierto, que no se encontró una relación significativa entre los intereses económicos y el hecho de que un cierto antidiabéticos fuera recomendado.
Concluyen, que los autores de las GPC tienen intereses económicos directamente relacionados con los antidiabéticos que ellos recomiendan, aunque no existió una asociación entre los CI y los fármacos recomendados en esas GPC. De todo ello se desprende que es difícil asegurar la validez de las recomendaciones de las GPC, al tiempo que la credibilidad de muchas de esas GPC se podría poner en entredicho.  En este sentido, bien para NICE, y un suspenso para el ADA y la AACE.

Norris SL, Holmer HK, Ogden LA, Burda BU, Fu R. Conflicts of Interest among Authors of Clinical Practice Guidelines for Glycemic Control in Type 2 Diabetes Mellitus. PLoS One. 2013 Oct 14;8(10):e75284. doi: 10.1371/journal.pone.0075284.

¿QUÉ INTERACCIÓN, TIPO Y GRAVEDAD, HAY ENTRE OMEPRAZOL Y LORAZEPAM?. Preevid. MurciaSalud

Respuesta

Aunque es conocida la interacción entre omeprazol y benzodiacepinas, al poder elevar el nivel plasmático de las benzodiacepinas que se  metabolizan por oxidación a través del citocromo p450; este efecto no está tan claro con el lorazepam, que se metaboliza por conjugación. La búsqueda tan solo ha encontrado un estudio que describe una posible interacción de omeprazol con lorazepam, en dos pacientes. 
El programa de interacciones farmacológicas de Lexicomp no identifica ninguna interacción específica entre omeprazol y lorazepam(1); pero  describe una interacción de severidad moderada para omeprazol y benzodiacepinas, que clasifica de tipo C ( la interacción es posible, puede tener significado clínico  y requiere una monitorización adecuada, debiendo ajustar dosis en una minoría de pacientes). Los inhibidores de la bomba de protones, excepto lansoprazol, pantoprazol y rabeprazol, pueden aumentar los niveles séricos de las benzodiacepinas metabolizados por oxidación; entre las que no se encuentra  el lorazepam, que se metaboliza por conjugación.
El programa de interacciones farmacológicas  de Stockley, dentro del apartado de interacciones entre omeprazol y benzodiacepinas, actualizada en junio  2013(2), refiere  un estudio  que describe un posible efecto por la asociación de omeprazol con loracepam:  dos pacientes de edad avanzada, ambos fumadores, en tratamiento con triazolam y lorazepam o flurazepam,  desarrollaron alteraciones de la marcha cuando iniciaron un tratamiento con 20 mg/día de omeprazol. Se recuperaron rápidamente tras la retirada de las benzodiazepinas o del omeprazol(3).
  • Igualmente concluye que omeprazol puede aumentar los niveles séricos de diazepam y de otras benzodiacepinas que se metabolizan por oxidación hepática y en las que participa el citocromo P 450.
  • Se indica que la reacción descrita con el lorazepam (y con otros glucurónidos de benzodiazepinas) podría no ser una interacción (tal y como se había comentado) sino un efecto adverso producido al administrar fármacos sedantes a pacientes con anemia importante.
La búsqueda realizada en bases de datos de estudios no ha encontrado otros artículos que describan interacciones en pacientes en tratamiento de forma simultánea con omeprazol y lorazepam.
La ficha técnica de omeprazol(4) señala que este principio activo se metaboliza en el hígado mediante el citocromo P450 2C19 (CYP2C19), por lo que puede prolongar, la eliminación de diacepam, al igual que la de otros  fármacos que se metabolizan por oxidación en el hígado. 
La ficha técnica de loracepam(5) señala sobre su metabolismo,  que lorazepam se conjuga en el hígado con el ácido glucurónico formando metabolitos inactivos que se excretan por vía renal. El 77% de la dosis se excreta como glucurónico en la orina. Lorazepam no se hidroxila de forma significativa, ni es un substrato de enzimas N-dealquilantes del sistema citocromo P450. Los compuestos que inhiben ciertos enzimas hepáticos (particularmente el citocromo P450) pueden potenciar la actividad de las benzodiazepinas. En menor grado, esto también es aplicable a aquellas benzodiazepinas que se metabolizan exclusivamente por conjugación. 

Referencias (5):

  1. Omeprazole, lorazepam. Lexi-Comp Online™ Interaction Analysis. In: UpToDate, Basow, DS (Ed), UpToDate, Waltham, MA, 2013.
  2. Stockley: Interacciones Farmacológicas. Benzodiazepinas con inhibidores de la bomba de protones. Fecha de revisión: noviembre del 2013.[Consultado en http://www.imedicinas.com el 2/12/2013]
  3. Martí-Massó JF, López de Munain A, López de Dicastillo G. Ataxia following gastric bleeding due to omeprazole–benzodiazepine interaction. Ann Pharmacother (1992) 26, 429–30.
  4. Ficha técnica de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS). Omeprazol Urlabs caps 20 mg EFG. Mayo 2001. [Texto Completo] [Consulta: 05/12/2013]
  5. Ficha técnica de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS). Loracepam Pensa EFG. Mayo 2007. [Texto Completo] [Consulta: 05/12/2013]
Estas referencias son del tipo:
  1. Metaanálisis y/o revisiones sistemáticas: 0 referencia
  2. Ensayos clínicos: 0 referencia
  3. Cohortes, casos controles, serie de casos clínicos: 1 referencia
  4. Consenso de profesionales: 0 referencia
  5. Guías de práctica clínica: 0 referencia
  6. Sumario de evidencia: 0 referencia
  7. Evaluaciones de fármacos: 2 referencias
  8. Ficha técnica de medicamento.: 2 referencias
  9. Información para pacientes: 0 referencia

(GuíaSalud) GPC de cistitis no complicada en la mujer

Guia de cistitis no complicada
Título: GUÍA DE PRÁCTICA CLÍNICA: CISTITIS NO COMPLICADA EN LA MUJER
Entidad(es) elaboradora(s): Asociación Española de Urología
Autores: Juan Palou Redorta, Félix Millán Rodríguez, Francisco José Brenes Bermúdez, Joan Costa i Pagès, Carlos Pigrau Serrallach.
Objetivos: Unificar criterios, a nivel nacional, en las recomendaciones terapéuticas de las infecciones urinarias no complicadas de las vías bajas en la mujer. Disponer de una guía de tratamiento empírico de las infecciones urinarias no complicadas de las vías bajas en la mujer, avalada por distintas sociedades médicas y que pueda ser asumida por las diferentes Comunidades Autónomas. Contribuir a reducir la variabilidad de la práctica clínica en una patología tan extendida y con afectación de un gran número de pacientes de diversas edades. Proporcionar elementos de concienciación para que los tratamientos se realicen de la forma más adecuada posible por parte de los profesionales y de las pacientes. Contribuir al uso racional, adecuado y seguro de los antibióticos, y consecuentemente al uso eficiente de los mismos, evitando tratamientos incorrectos y la aparición de resistencias innecesarias. Establecer claramente los criterios de derivación de estas pacientes al urólogo, al ginecólogo o atención especializada.
Condición: El paciente diana es toda mujer afecta de cistitis no complicada, definida como aquella infección urinaria que ocurre en personas que tienen un tracto urinario normal, sin alteraciones funcionales o anatómicas, sin historia reciente de instrumentación (sondaje, uretrocistoscopia) y cuyos síntomas se presentan confinados en la vejiga. Las pacientes diana presentan una edad comprendida entre los 16 años y sin límite de edad máxima. Esta decisión está basada en la edad de inicio de las relaciones sexuales entre los jóvenes españoles. No obstante, también se incluirán las pacientes de 14 y 15 años que sean sexualmente activas.